lunes, 28 de septiembre de 2015

Los jardines

Un agujero en el asfalto

donde el ruido se atenúa,
un cercado espacio
donde las tórtolas ululan.

El hombre es extranjero
en estos parajes.
Sus prisas, su deshumanización
son despreciados visitantes.

No obstante, la amenaza sigue vigente.
Por mucho que te evadas,
la dragones rugen,
los caballeros discuten.
Adiós al nirvana.

Un pedazo inmóvil en lo acelerado,
un poco de humanidad en lo poblado.

J.M.González

jueves, 24 de septiembre de 2015

En la habitación y la acera

¡Hipócritas bohemios!
Se gastan el dinero
por algo irrealmente bueno.

Un crítico bien hablado,
una firma de hace años
convierten la bazofia en cuadro,
en genio al ignorado.

El arte es sentimiento.
Profesional o diletante
siempre es admirable.

Pagad con vuestro dinero
y entrad en el museo,
pero el comienzo,
tenedlo en cuenta,
que es callejero.

J.M.González

martes, 22 de septiembre de 2015

Falta de ti

Sufrir para vivir 
porque mi vida está en ti.

Pierdo mi ser
y no emerjo.

De tus sudores
tengo sed,
tu sonrisa
me muero por ver.

Me faltan palabras,
no quieren salir,
mis manos no las trazan.

Sufrir para vivir
porque mi vida está en ti.
Sufrir para sentir
que algún día te tendré aquí.


                                                     J.M.González

sábado, 19 de septiembre de 2015

Hongo de tu árbol


Soy hongo,

crezco solo
si con tu piel
humedeces mis pies.

Sorbiendo tus palabras
marcando el oeste.
Aunque hace mil semanas
perdí el norte,
tu cabello enreda razones.

Soy musgo,
persistente arraigado
creciendo en tu costado.
Fácil de desraizar
si es tu voluntad.

Soy seta,
alimentándome de los restos
que te excedan.
Me sacian suficiente,
de un rey el banquete.


J.M.González

miércoles, 16 de septiembre de 2015

Nadie

¿Quién soy? A mis ojos y mente soy quien decidí ser, con mis ideales, con mis alegrías, recuerdos y motivos. ¿Quién soy realmente? Soy quien los demás quieren que sea, producto de mi carátula. Debo cumplir unas expectativas, estoy obligado a no cruzar la línea que separa lo aceptable de lo que deseo. Abro mi libro y permito leer un capítulo de mi filosofía, semicompleta y pura, contándola tal cual es, sin recodos ni entre líneas, y ellos me la pervierten, la censuran y me la entregan. Me definen adaptando mis ideas a lo establecido: "El poliamor es solo para follar; La filantropía es de tontos; Eres joven, ama la fiesta; Tírate a una tía para que haya sido una buena noche;..." Ante tal violación me levanto y respondo "¡NO!" y me amordazan con un "tiempo al tiempo".

Las peores palabras no son las que no se dicen ni las que no se escuchan, son aquellas que se escuchan y se desechan como suciedad en los oídos, como basura en el mundo. Finalmente acabas guardándotelas, prefiriendo aparentar lo que el mundo quiere creer de ti...¿Cuánto tardarás en creértelo? Es lo único que piensa tu cerebro.



                                                                                                              J.M.González